Después de la entrada que hice el 16/09/2011 sobre "Androides y tabletas, umpc y windows", mucho ha llovido y no sólo sobre estos dispositivos, también sobre mi bolsillo.
La tableta que renovó mi Asus Eeepad Transformer TF-101 terminó siendo una Samsung Galaxy Note 8.0. Los motivos fueron claros para mí (y mis muñecas).
Fuente Xataka |
La Asus pesaba demasiado, la pantalla era de 10 pulgadas, sí, pero para mi uso era excesiva. Al cambiar a la Galaxy note 8.0 no sólo reducía peso y tamaño de pantalla (y todo lo que uso como App's educativas funcionan perfectamente) sino que además el S-Pen merecía (a priori), merece y va a seguir mereciendo mientras esté en uso, el dinero invertido en él.
Por poner un ejemplo de su utilidad, mientras estuve como jefe de estudios en mi centro de destino las reuniones las escribía en mi tablet con una facilidad, rapidez y limpieza que me permitía llevarla como herramienta de trabajo, prescindiendo de cuadernos y más cuadernos donde escribir, redactar, etc.). Estar conectado y acceder a Séneca, imprimir en red, archivar o subir a la nube mis anotaciones son otras de las muchas ventajas que tiene.
En clase, y gracias al accesorio correspondiente, podía conectarla al proyector del aula y así compartir con mis alumnos los contenidos que había hecho para casos concretos (vídeos con
Explain Everything Whiteboard o Lensoo Create o actividades en Kahoot) o incluso app's como MindMeister (versión web) o para android MindMeister (donde les mostraba mapas mentales) o Periodic Table-Chemistry Tools que es de lo mejor que he visto (se puede estudiar las propiedades de la tabla periódica de esta forma
Sin embargo, y después de todo ese despliegue (y el que ya no cuento por no hacerme pesado) la utilidad que más me satisfizo fue que un alumno que en el curso pasado tenía que acudir al centro en silla de ruedas (él no era discapacitado pero tenía limitada su movilidad en ese curso por operaciones en las piernas muy dolorosas y no podía salir a la pizarra a corregir ni explicar sus trabajos) pudo hacer ante sus compañeros actividades (a través del proyector y mi tableta con S-pen) y explicar su trabajo en tiempo real.
Pero me encuentro en un dilema, porque la gama de tablets Galaxy Note ha sido abandonada por Samsung a favor de su gama Galaxy Tab A
Esta tableta tiene más prestaciones que la Note 8.0 (es actual), mayores dimensiones de pantalla, con S-pen, pero no pesa mucho más (Note 8.0 338 g y Tab A 438 g). Cuando mi Note 8.0 deje de dar servicio ya tengo tablet sustituta. Habrá que ver si las aplicaciones que uso son compatibles o no se han actualizado.
Actualización (13/08/16): ¡Zas en toda la boca! Como diría un personaje de una famosa serie de comedia, eso es lo que me ha pasado con la seria galaxy A. Después de estudiar los comentarios de los primeros compradores, he podido comprobar que la resolución de pantalla es inferior a la de mi Galaxy Note 8.0, no es mucho menos, pero lo suficiente para que aparezcan críticas a la resolución de la pantalla en la red para el Galaxy A. Buscando una alternativa, me centro el la Galaxy S, pero no es lo que busco. El motivo es que la satisfacción de escritura (con un pen ajeno a la marca) es insuficiente. No se puede escribir con la soltura que con el Note 8.0 o la Galaxy A. No puedo más que decir "no se puede tener todo en un mismo dispositivo".